El olfato es uno de los sentidos más importantes que posee el ser humano ya que está vinculado al Sistema Nervioso e interviene en los procesos de memoria.
En casos en los que se ha perdido este sentido total o parcialmente, por ejemplo, a causa de una secuela después de haber padecido COVID, es posible volver a estimular este sentido utilizando una serie de aceites esenciales (Lavanda, Mandarina, ciprés, jengibre) inhalados de manera continua y consciente y en un orden concreto. Estos aceites pueden restablecer la conexión entre neuronas de manera que se puede recuperar el olfato progresivamente. Se trata de inhalar cada aceite durante 30 segundos, con ayuda del Aromastick que contiene algodón y se impregna con unas gotas del aceite esencial.
El protocolo a seguir es el siguiente:
Es aconsejable hacer este protocolo 3 veces al día.
Más adelante se puede ir reduciendo su frecuencia cuando se haya recuperado el olfato.
El proceso puede durar semanas o meses.
Se pueden utilizar a cualquier edad, embarazo y lactancia. Contraindicado en caso de asma.
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