Las medias, hacen una compresión gradual decreciente, siendo mayor en la zona del tobillo y disminuyendo conforme avanza a lo largo de la pierna. Existen de distintas compresiones en función a la patología a tratar, siendo la compresión fuerte prescrita normalmente por tu médico de referencia. Las medias de compresión actúan como tratamiento preventivo y terapéutico en problemas circulatorios en las venas.
Las medias de compresión tienen un doble efecto preventivo y terapéutico de los problemas venosos. Su mecanismo de acción consiste en la aplicación de presión externa sobre determinados puntos de las piernas y de manera decreciente hasta el muslo, de manera que favorece que la sangre ascienda hasta el corazón. También comprimen las venas, evitando que éstas continúen dilatándose y almacenando sangre en su interior.
Por lo tanto, el uso de las medias de compresión está indicado en personas con varices y arañas vasculares, tras intervenciones quirúrgicas, edemas, alteraciones durante el embarazo, y para aquellas personas que, por su profesión, pasan mucho tiempo sentadas o de pie.
Tipos de medias de compresión:
- Compresión ligera o normal: para mejorar la circulación de la sangre en piernas cansadas, como prevención de varices o existencia de pequeñas arañas varicosas, para mujeres embarazadas y para profesionales que pasen mucho tiempo tanto sentados como de pie.
- Compresión fuerte: para tratar enfermedades venosas más graves.
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